MULTAS A LOS PEATONES

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Ministro de Seguridad GUILLERMO MONTENEGRO quiere empezar a sancionar a los peatones imprudentes. El código de faltas de la ciudad de Bs As prevee multas de $ 25,00 a $ 100,00 para los que cruzan mal la calle. Pero expertos advierten que, antes de salir a multar, hay que hacer una campaña de concientización.
“El peatón es el elemento más débil del tránsito y no estoy de acuerdo en que las sanciones recaigan sobre él” opinó el Dr EDUARDO BERTOTTI, titular del ISEV y continuó: En cambio el automovilista está portando un riesgo. Hay que pensar para que se quiere la ciudad: si vamos a privilegiar al auto o al peatón”.
Por su parte el Dr ALBERTO SILVEIRA de Luchemos por la Vida, observó: “Es verdad que los peatones son permanentes transgresores, pero no es el momento de sancionarlos. Primero, hay que hacer una campaña de concientización. Además, para que el peatón sienta a la sanción como legítima tiene que saber que los automovilistas también están siendo sancionados por sus transgresiones".
"Va a ser difícil la aplicación de la multa -objetó el Ing GUSTAVO BRAMBATI, gerente de Seguridad Vial de CESVI-. Algunos países utilizan las sanciones morales para ridiculizar al infractor. Por otra parte, las campañas de seguridad vial actuales no involucran a los peatones. Hay que invertir mucho para cambiar su actitud".

A continuación el Dr EDUARDO BERTOTTI escribió lo siguiente:
Sinceramente no se cual es el objetivo que se persigue cuando se anuncia “estar estudiando como sancionar al peatón por sus inconductas viales”. Pero tampoco me parece útil detenerme a investigar el mismo. “El tiempo es oro” y en el caso de la Seguridad Vial, son vidas.
Lo cierto es (no porque lo afirme yo, sino por la experiencia abrumadora a nivel mundial) que no se encuentran muchos antecedentes en el mundo, y menos que sean exitosos. El más cercano, geográfica y temporalmente es el de Ecuador y realmente es un verdadero dolor de cabeza identificar al infractor y lograr percibir la multa. ¿La efectividad?; para ser justos, es muy reciente para evaluarla y habrá que ponderarla dentro de una gran batería de acciones que están implementando. Sin embargo, los informes que nos llegan a través de sus medios de prensa hablan sobre el desaliento de la Policía y el abandono del control.
El tema en realidad enfrenta dos problemas:
1. La naturaleza y condición del sujeto punible: Con todo, el peatón sigue siendo el participante más vulnerable de los usuarios de la vía pública y el conductor de automotor particular el responsable de aportar riesgo a la circulación en las ciudades, para su beneficio personal. “A esto sumemos un diseño urbano y vial pensado para el automóvil, tales como ciclos de semáforos que privilegian la circulación vehicular en desmedro de la peatonal, anchos de calles con tiempos de cruce no acordes con la velocidad de circulación de niños, ancianos y personas con discapacidades, señalización peatonal inconsistente, etc. En fin, diseños viales que no contemplan en absoluto las recomendaciones de los modernos estudios de factor humano, rama de la seguridad de tránsito que se desarrolla a partir del involucramiento de psicólogos en la seguridad vial. Y peor aún, diseños viales que castigan el error (o la irresponsabilidad) con la muerte” (Prof. Luis Rizzi, del Dpto. de Ing. de Transporte y Logística de la Pontificia Universidad Católica de Chile).
2. La “garantía” de lograr la ejecución de la sanción: A un conductor de automotor, moto o ciclomotor (y aún hasta de una bicicleta) podríamos (con las normas previamente establecidas) secuestrarle el vehículo para garantizarnos el pago de la multa. ¿Pero que hacemos con el peatón?, ¿le SECUESTRAMOS LOS ZAPATOS?
Mucho más conducente me parece continuar sistematizando y profundizando los controles de alcoholemia, cascos (¡que tal uso de cinturón?!), velocidad, luz roja. Todas medidas que, de conformidad con lo expresado por el Ministro de Seguridad de la Ciudad redujeron en más de la mitad las muertes por siniestros viales en la Ciudad (¡un caso único a nivel mundial en tan poco tiempo!).
Eso si, EDUQUEMOS al peatón y hagámosle una vía pública más amigable y segura.

OPINION PERSONAL

Por último, vemos que en Concordia, la mayoría de los automovilistas, motociclistas, etc no saben, o no quieren saber que al doblar, aunque exista el semáforo, pierde su prioridad de paso debiendo respetar en un todo al peatón, como dice el Art 41 Prioridades, Inc e) los peatones que cruzan lícitamente la calzada por la senda peatonal o en zona peligrosa señalizada como tal, debiendo el conductor detener el vehículo si pone en peligro al peatón. (por otra parte si la senda peatonal no está demarcada, el Art 5 Inc T de la Ley Nacional de Tránsito dice “Senda Peatonal: el sector de la calzada destinado al cruce de ella por peatones y demás usuarios, de la cera. SI NO ESTA DELIMITADA ES LA PROLOGANCION LONGITUDINAL DE ÉSTA)

ANTES DE SANCIONAR AL PEATÓN, QUE ES EL ELEMENTO MÁS DEBIL DEL TRANSITO, SE DEBE CONCIENTIZAR A LOS CONDUCTORES QUE DE CONDUCIR UN VEHÍCULO, LO TRANSFORMAN EN UN ARMA MORTAL.